De acuerdo a lo informado, a Juan nunca le contaron la verdad y hasta su adolescencia creyó que era hijo biológico del matrimonio de apropiadores. Entre 2000 y 2001 tuvo dudas sobre su identidad y se puso en contacto con Abuelas de Plaza de Mayo. En 2003, la Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad lo contactó para entregarle la documentación que habÃa logrado recopilar hasta el momento, en base a las denuncias que habÃa realizado Máxima Rita Moreno, tÃa de su madre.
Juan Jose espera saber la identidad de su papá para poder reconstruir toda su historia y llamo a la sociedad a no tener miedo de indagar sobre su identidad y que no pierdan las esperanzas.
Al finalizar las abuelas destacaron que «El 2022 finaliza asà con la resolución de un nuevo caso que renueva las esperanzas de este camino de verdad, memoria, justicia e identidad. Esperamos que el 2023 nos reciba con muchos más encuentros».